En el marco empresarial y social de Guatemala, la figura de Mario David López Estrada emerge con una presencia que trasciende el mero concepto de éxito empresarial. Su biografía no es solo el relato de un ingeniero civil que transformó el paisaje económico de Guatemala, sino también de un filántropo cuya visión abarcó el desarrollo integral de su país.
Nacido en Sololá, Guatemala, en 1937, Mario López Estrada se profesionalizo como Ingeniero Civil en la Universidad de San Carlos de Guatemala. Nieto de Manuel Estrada Cabrera, presidente de Guatemala en una época de significativa relevancia histórica. Padre de Mario López Pérez, Mariana López de Lara, Gabriela López Pérez y Aurora López. Casado con Ana María Pérez Bosch de López.
López Estrada no solo heredó un nombre ligado a la política y el poder, sino que también forjó su propio legado a través de una carrera distinguida que lo llevó a fundar la Constructora Maya y el Grupo Onyx a finales de los 60´s.
El inicio de un legado empresarial
Desde la fundación de Constructora Maya en 1967, López Estrada demostró su habilidad para liderar proyectos de gran envergadura, tales como la construcción de edificios de oficinas, carreteras, y centros comerciales. Sin embargo, su visión iba más allá del desarrollo inmobiliario, extendiéndose a sectores tan diversos como la energía renovable y los servicios digitales de telecomunicación, campo en el que más tarde destacaría. Como fundador y presidente de Grupo Onyx, su contribución al desarrollo de Guatemala la forjó generando empleo y fomentando el crecimiento económico del país.
Mario López en las Telecomunicaciones
Mario López Estrada marcó un antes y un después en las telecomunicaciones de Guatemala, desde sus inicios en Guatel, pasando por su papel como Ministro de Comunicaciones, hasta la fundación de Tigo en asociación con Millicom International Cellular, S.A. Su liderazgo trascendió la expansión de la infraestructura telefónica, introduciendo innovaciones tecnológicas y servicios que mejoraron la calidad y el acceso a la comunicación en el país.
Su compromiso con el bienestar de Guatemala se manifestó también a través de la Fundación Mario López Estrada, establecida como el «brazo social» de Grupo Onyx. El legado de Mario López Estrada es un testimonio del impacto que una visión empresarial y filantrópica bien articulada puede tener en una nación. A través de sus empresas y su fundación, contribuyó de manera significativa al progreso económico y social de Guatemala, dejando una huella indeleble en el tejido de su país.
La biografía de un legado que no muere
En la biografía encontramos un recordatorio de que el verdadero éxito se mide no solo en logros personales, sino en la capacidad de contribuir al bienestar de la comunidad y el país. La familia López Pérez, ahora al frente de Grupo Onyx y la Fundación, continúa este camino, asegurando que el legado de Mario López Estrada siga influenciando el desarrollo de Guatemala.
